El cambio climático representa la mayor amenaza para la supervivencia de la humanidad y para el desarrollo de las naciones. Este fenómeno pone en riesgo a la población por sus efectos adversos, que incluyen principalmente la variabilidad y los extremos del clima, pero también incide directamente en la pérdida de la biodiversidad y la capacidad de los ecosistemas de ofrecer bienes y servicios ambientales.
Las recientes investigaciones señalan que para Michoacán se estima un incremento de temperatura de 1.4 °C para 2030 y 2.2 °C para el 2060 y una disminución promedio de la precipitación de 8.8 % para 2030, 14.3 % para 2060 afectando directamente la producción de forrajera, agrícola y frutícola, y poniendo en peligro los santuarios de la mariposa monarca y aumentando considerablemente la incidencia de riesgos por eventos climatológicos atípicos entre otros efectos. De ahí la importancia que reviste el cambio climático y la necesidad de diseñar e implementar de forma eficaz políticas públicas a todos los niveles y ejecutar acciones concretas con visión de largo plazo.
Dado que el cambio climático se atribuye, directa o indirectamente, a la actividad humana es imprescindible generar canales de comunicación diversos y espacios públicos que sean un vehículo adecuado para comprender sus causas e involucrar de forma corresponsable a la sociedad en la reducción colectiva de sus impactos.
De ahí la importancia de la Federación de financiar en el año 2010 el Centro de Información y Educación Ambiental Climática. Este Centro integra al estado de Michoacán a la Red de Información y Vigilancia Climática Global que tiene como objetivo elevar el nivel de conciencia de los procesos locales, regionales y globales de la población y está equipado con tecnología de punta que permitirá desplegar imágenes educativas sobre procesos planetarios del Cambio Climático Global.
La obra tuvo un costo total de ocho millones novecientos mil pesos de los cuales la Federación invirtió ocho millones y medio de un total de 64 millones que se invirtieron en proyectos especiales de infraestructura ambiental durante el 2010 entre ellos dos Centros Municipales y dos Intermunicipales para el Tratamiento Integral de Residuos Sólidos así como dos parques urbanos en Morelia y la remodelación del área de incubación del Parque Zoológico Benito Juárez. Esta inversión ha sido histórica para Michoacán.
Esto con el fin de contribuir al involucramiento público y a la comprensión del cambio climático y a la generación de acciones sociales para adaptarse y mitigarlo en forma colectiva.
