EL GOBIERNO FEDERAL ACTÚA CON RESPONSABILIDAD
EN MATERIA DE TRANSGÉNICOS .
EN MATERIA DE TRANSGÉNICOS .
La Sagarpa y la Semarnat informaron que han sido expedidos 15 permisos para siembras experimentales de maíz genéticamente modificado.
Los permisos se otorgaron con estricto apego a la Ley de Bioseguridad Sobre Organismos Genéticamente Modificados y a su Reglamento.
En conferencia de prensa, las secretarías de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa), y de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), informaron que al día de hoy han sido expedidos 15 permisos, de un total de 35 solicitudes recibidas, para la realización de siembras experimentales de maíz genéticamente modificado.
Los permisos otorgados por la Sagarpa y con análisis vinculante de la Semarnat, están estrictamente apegados a la Ley de Bioseguridad Sobre Organismos Genéticamente Modificados y a su Reglamento.
Del total de permisos entregados, nueve son para la empresa Monsanto Comercial y seis para la empresa Dow AgroScience/PHI México.
De los nueve correspondientes a Monsanto Comercial, tres se realizarán en los campos del Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias (INIFAP-Noroeste), situados en el municipio de Cajeme, en Sonora; tres en los municipios de Ahome, Guasave y Navolato, en Sinaloa, y tres en los municipios de Valle Hermoso, Matamoros y Río Bravo, en Tamaulipas.
De los seis otorgados a Dow AgroScience/PHI México, tres se llevarán a cabo en el Valle del Yaqui y Huatabampo, en Sonora, y tres en Los Mochis, Culiacán; Angostura y Navolato, en Sinaloa.
El titular de la Semarnat, Juan Rafael Elvira Quesada, señaló que el Gobierno Federal, a través de las dos secretarías, trabaja en este tema “sin dejarse influenciar por ningún tipo de presión, sino en apego a los tiempos que marca la ley, ya que lo más importante es dar a la sociedad la garantía de que se está haciendo el mejor de los trabajos”.
Por su parte, el Director en Jefe del Servicio Nacional de Sanidad Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica) de la Sagarpa, Enrique Sánchez Cruz, explicó que para establecer las medidas de bioseguridad que se aplicarán en las siembras experimentales se tomaron en cuenta opiniones técnicas y científicas presentadas por expertos y por la ciudanía en el proceso de consulta pública, misma que se llevó a cabo en cumplimiento a la Ley con el apoyo de la Comisión Intersecretarial de Bioseguridad de los Organismos Genéticamente Modificados (Cibiogem).
Aclaró que las siembras que se realizarán se mantienen en la fase de experimento y se harán en terrenos controlados y totalmente aislados de otro tipo de cultivos.
En cuanto a las medidas de bioseguridad establecidas por la ley, el Subsecretario de Gestión para la Protección Ambiental de la Semarnat, Mauricio Limón Aguirre, mencionó la implementación de mallas ciclónicas para evitar el fácil acceso a estas pequeñas parcelas donde se llevarán a cabo los experimentos; guardar una distancia mínima de por lo menos 500 metros respecto de otros cultivos; marcar un aislamiento temporal después de un mes para evitar flujo génico a un posible maíz convencional.
Los permisos se otorgaron con estricto apego a la Ley de Bioseguridad Sobre Organismos Genéticamente Modificados y a su Reglamento.
En conferencia de prensa, las secretarías de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa), y de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), informaron que al día de hoy han sido expedidos 15 permisos, de un total de 35 solicitudes recibidas, para la realización de siembras experimentales de maíz genéticamente modificado.
Los permisos otorgados por la Sagarpa y con análisis vinculante de la Semarnat, están estrictamente apegados a la Ley de Bioseguridad Sobre Organismos Genéticamente Modificados y a su Reglamento.
Del total de permisos entregados, nueve son para la empresa Monsanto Comercial y seis para la empresa Dow AgroScience/PHI México.
De los nueve correspondientes a Monsanto Comercial, tres se realizarán en los campos del Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias (INIFAP-Noroeste), situados en el municipio de Cajeme, en Sonora; tres en los municipios de Ahome, Guasave y Navolato, en Sinaloa, y tres en los municipios de Valle Hermoso, Matamoros y Río Bravo, en Tamaulipas.
De los seis otorgados a Dow AgroScience/PHI México, tres se llevarán a cabo en el Valle del Yaqui y Huatabampo, en Sonora, y tres en Los Mochis, Culiacán; Angostura y Navolato, en Sinaloa.
El titular de la Semarnat, Juan Rafael Elvira Quesada, señaló que el Gobierno Federal, a través de las dos secretarías, trabaja en este tema “sin dejarse influenciar por ningún tipo de presión, sino en apego a los tiempos que marca la ley, ya que lo más importante es dar a la sociedad la garantía de que se está haciendo el mejor de los trabajos”.
Por su parte, el Director en Jefe del Servicio Nacional de Sanidad Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica) de la Sagarpa, Enrique Sánchez Cruz, explicó que para establecer las medidas de bioseguridad que se aplicarán en las siembras experimentales se tomaron en cuenta opiniones técnicas y científicas presentadas por expertos y por la ciudanía en el proceso de consulta pública, misma que se llevó a cabo en cumplimiento a la Ley con el apoyo de la Comisión Intersecretarial de Bioseguridad de los Organismos Genéticamente Modificados (Cibiogem).
Aclaró que las siembras que se realizarán se mantienen en la fase de experimento y se harán en terrenos controlados y totalmente aislados de otro tipo de cultivos.
En cuanto a las medidas de bioseguridad establecidas por la ley, el Subsecretario de Gestión para la Protección Ambiental de la Semarnat, Mauricio Limón Aguirre, mencionó la implementación de mallas ciclónicas para evitar el fácil acceso a estas pequeñas parcelas donde se llevarán a cabo los experimentos; guardar una distancia mínima de por lo menos 500 metros respecto de otros cultivos; marcar un aislamiento temporal después de un mes para evitar flujo génico a un posible maíz convencional.
Comunicación Social-SEMARNAT
Asimismo, precisar las coordenadas geográficas; establecer una bitácora, instalar plantas de polen para que no pueda haber flujo por esta vía, así como incinerar el producto, ya que, aclaró, éste no entra al mercado alimentario.
Asimismo, precisar las coordenadas geográficas; establecer una bitácora, instalar plantas de polen para que no pueda haber flujo por esta vía, así como incinerar el producto, ya que, aclaró, éste no entra al mercado alimentario.